Apenas dos meses después de que ChatGPT de OpenAI arrasara en todo el mundo, el gigante chino de las búsquedas, Baidu, anunciará su propia IA conversacional en marzo, que se basará en el sistema Ernie de Baidu. Un modelo de aprendizaje automático muy avanzado con un fuerte enfoque en el procesamiento del lenguaje natural. Este movimiento de la empresa se produce en medio de una competencia creciente en la industria de la IA, ya que las empresas tecnológicas se apresuran a crear un rival para ChatGPT.
¿Cuál es el rumor en torno a ChatGPT?
Desde su lanzamiento, ChatGPT de OpenAI ha estado haciendo olas en el mundo de la tecnología con sus impresionantes habilidades, que incluyen responder preguntas, escribir de manera humana e incluso escribir y depurar código. Ahora Microsoft, el mayor inversor de la empresa, busca integrar ChatGPT en su motor de búsqueda Bing. Esto ha causado cierto pánico en los gigantes de la industria de búsqueda como Google, que ha declarado el código rojo en un esfuerzo por construir un rival, ya que la integración de ChatGPT en Bing le dará a Microsoft una gran ventaja.
El crecimiento de Baidu ha sido insuficiente en el mercado de búsqueda, pero la empresa ve el potencial de los servicios de IA conversacionales para darle una ventaja sobre sus competidores. Esta noticia de Baidu anunciando un competidor para ChatGPT ha resultado en que las acciones de la compañía salten más del 5%. Y según Bloomberg, el CEO de Baidu, Robin Li, expresó su entusiasmo por la tecnología al decir: “Estoy muy contento de que la tecnología en la que reflexionamos todos los días pueda atraer la atención de tantas personas. Eso no es fácil.”
Sin embargo, a pesar de la emoción y el revuelo en torno a ChatGPT, es importante tener en cuenta que también ha habido algunas preocupaciones sobre sus capacidades y limitaciones. Los sitios de noticias tecnológicas como CNET han estado utilizando la herramienta para escribir artículos, y las preocupaciones por el plagio han llevado a las escuelas públicas de la ciudad de Nueva York a prohibir el servicio por miedo a hacer trampa, ya que el resultado puede ser indistinguible del contenido creado por los estudiantes.